Esta vivienda de Ciutat Vella de Valencia se caracteriza por un diseño de interior con mobiliario mobiliario a medida, móvil y oculto como elemento principal.
El ejercicio recurrente de plantear la reforma eliminando tabiques se ha llevado al extremo, permitiendo que salvo el aseo, todo las estancias de la casa convivan en un mismo espacio polivalente, transformable y dinámico.
El mobiliario que recorre el perímetro de la vivienda, es el contenedor de las estancias que se abren (o cierran) al espacio general. Haciendo posible que una cocina aparezca de la nada o que un dormitorio independiente desaparezca y ceda su espacio al salón.